El IMIDA desarrolla nuevos hidroacolchados más sostenibles, eficientes y que aumentan la productividad de los cultivos
10·06·2024 | NOTICIA IMIDA
Presenta numerosos beneficios para el agricultor como la disminución de costes, ya que el agricultor podrá fabricar su propio acolchado, la reducción de insumos como agua, fertilizantes o herbicidas, así como mejora del suelo y la rentabilidad.
El Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA), dependiente de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, ha desarrollado nuevos hidroacolchados, derivados de residuos vegetales reciclados, que son más sostenibles, eficientes y aumentan la productividad y rentabilidad de los cultivos.
El director del IMIDA, Andrés Martínez Bastida, aseguró, durante la jornada celebrada en las instalaciones del instituto, dentro del proyecto del Plan Complementario de Agroalimentación (Agroalnext), que “se trata de un sustitutivo del plástico y que utiliza diversos restos vegetales para su fabricación, por lo que cuando se degrada se convierte en nutrientes naturales para los cultivos”.
Martínez Bastida destacó que el proyecto, liderado por Josefa López-Marín, del Equipo de Horticultura, “ha constatado que hay una reducción en el consumo de insumos, entre los que destaca el aporte de nutrientes a la planta por fertirrigación, la disminución del consumo de agua o la aplicación de herbicidas, por lo que es más sostenible y respetuoso con el medio ambiente”.
“Además, ha demostrado que aumenta la producción, la precocidad de los cultivos y, por tanto, el incremento de la rentabilidad”, indicó.
El hidroacolchado está basado en formulaciones derivadas de residuos reciclados. Los restos vegetales en estudio son de cultivo de pimiento, alcachofa, melón, tomate, restos de poda de melocotón, limonero, naranjo, almendro y vid.
Calidad del suelo
El descenso en el consumo de agua y el aumento de la precocidad está basado en el efecto barrera que ofrece el hidroacolchado orgánico. A lo largo del ciclo de cultivo se va degradando y ello genera un aporte de nutrientes al suelo y, por consiguiente, estos van a estar disponibles para la planta, que lo puede absorber a través de la raíz. Además una vez finalizado el cultivo, este material al ser orgánico se puede enterrar y mejorar la calidad del suelo, tanto mineral como de la microbiota.
La optimización de esta técnica a los diferentes cultivos de la Región de Murcia, como pueden ser melón, lechuga, brócoli, pimiento, e incluso frutales y cítricos, presenta numerosos beneficios para el agricultor, como la disminución de costes, ya que el agricultor se podrá fabricar su propio acolchado, además de la reducción de los insumos (agua, fertilizantes, herbicidas).
Desde IMIDA se están realizando estudios de alternativa a los acolchados plástico de polietileno, como es el hidroacolchado, mediante el desarrollo de dos proyectos de investigación, ‘Nuevos hidroacolchados como alternativa al uso de plásticos en cultivos hortícolas para control de malas hierbas y mejora del uso eficiente de agua’, financiado por Ministerio de Ciencia e Innovación, y el proyecto Agroalnext ‘Circularidad de nutrientes, reducción de insumos y residuos’, financiado por la Unión Europea-NextGenerationEU y la Comunidad Autónoma de Murcia, a través de la Fundación Séneca.
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